Un aprendizaje vivencial que profundizó su vocación, despertó su visión y acrecentó su campo ocupacional, fueron algunas de las virtuosas evidencias que se reflejaron en la ceremonia de Certificación de Emprendedores, que fueron asesorados por estudiantes de la carrera de Ingeniería en Alimentos en la ULagos.
En este contexto, la actividad fue la culminación del trabajo realizado durante el primer semestre de 2024, en que las y los estudiantes de tercer año de la carrera de Ingeniería en Alimentos, en la asignatura Ciudadanía 2, tuvieron como aprendizaje, visualizar la problemática de la comunidad para intervenir, en la búsqueda de una solución al problema.
Betty Ronceros, directora Docente de la carrera de Ingeniería en Alimentos de la ULagos, sostuvo que a nivel nacional, hay muchos emprendedores del área alimentos “con una infinidad de problemas; obtener una resolución sanitaria, un etiquetado nutricional en sus productos, manuales de procedimiento, verificar inocuidad, en fin, son una serie de problemas que ellos tienen y que muchas veces no saben cómo resolverlos porque no tienen el conocimiento en relación a los alimentos”, aseguró.
Según la académica, fue un desafío interesante, ya que trabajaron con 8 emprendedoras, 4 de la isla de Chiloé, 4 de Osorno y otras comunas.
La profesional relató que las y los emprendedores llegan a la ULagos, en busca de ayuda y apoyo. Por ejemplo, los emprendedores de Chiloé fueron canalizados a través del Centro de Negocios a través de un convenio existente que ha permitido un trabajo previo.
Según la directora Docente, en este desafío, los estudiantes contactaban a los emprendedores e iban a terreno a visualizar el problema, de forma que pudieran establecer ¿Qué tan lejos los emprendedores estaban trabajando en relación a la normativa del reglamento sanitario de alimentos? Y, de esa manera, “el aprendizaje del estudiante es potente, porque no solamente ven algo teórico, sino que aplican en análisis el conocimiento y la realidad. Pueden discriminar qué también o qué tan mal, los emprendedores están trabajando y ser capaces de sugerirles mejoras, modificar algunos procesos en beneficio de lograr la inocuidad tan deseada por todos”, precisó.
Metodología
La académica comentó que la metodología de enseñanza cambia a la que usualmente se aplica en el aula. “No es la metodología tradicional de la sala de clases, en que muchas veces el desafío de los profesores es tremendo, porque con tantos elementos distractores como el celular o audífonos, muchas veces los estudiantes que están en la sala de clases tienen su mente en cualquier otro lugar”, indicó.
En su análisis, la docente explica que los estudiantes, al utilizar la metodología de enseñanza en que acuden a terreno, se sienten empoderados, no solamente porque saben que van a colaborar con un emprendedor que lo necesita, sino además, se dan cuenta que su conocimiento tiene una aplicación, algo concreto, en ese sentido, ayuda también a la autoestima.
“Es increíble cómo el estudiante, al final, se da cuenta que puede solucionar este problema. Entonces hay un tema de competencias blandas muy importante; trabajo en equipo, proactividad, responsabilidad, comunicación con los emprendedores. Esta metodología de RSU, Aprendizaje más Servicio ha sido potente. Por lo menos nos ha dado muy buenos resultados en la carrera y cada vez son más los profesores que se están sumando. Pienso que estamos por un buen camino, creo que hemos logrado detectar nuestro foco de acción en este caso con emprendedores del área de alimentos”, destacó.
Lorena Bequer, y sus productos gourmet, Carbeck, es un emprendimiento enfocado en pastas de ají, principalmente, harina de pastas de ajo y mermeladas.
Ella relata que “cuando nosotros decidimos formalizarnos, a través del Centro de Negocios y, cómo no teníamos un lugar donde elaborar con resolución sanitaria, nos ..{dieron la posibilidad de venir a la universidad. Me comuniqué con la profesora Betty Ronceros, quien nos invitó a la Planta Piloto y desde hace dos años hemos sido asesorados y elaboramos productos”, puntualizó.
“En este momento, nosotros estamos en proyecto de tener nuestra propia planta y formar parte de este programa, con la asesoría de las estudiantes de la carrera de Ingeniería en Alimentos, vamos a saber cómo preparar los documentos y cómo hacer todo el proceso”, señaló.
Estudiantes
Rodolfo Valdés Solís, es estudiante de Ingeniería en Alimentos, en convalidación con el Técnico Universitario en Gestión y Desarrollo de Productos Alimentarios.
Le correspondió trabajar en los manuales de procedimiento con su grupo, basándose en las normativas vigentes y reglamentos sanitarios de los alimentos.
“Si una emprendedora no tiene los manuales de procedimiento no puede formalizase y obtener resolución sanitaria, por ejemplo”, aclaró.
En cuanto a su formación profesional, el futuro profesional indicó que el trabajo de asesoramiento a las emprendedoras “es muy relevante, ya que aprendemos a elaborar manuales de procedimiento y a trabajar con emprendedores para poner en práctica todos los conocimientos teóricos aprendidos en clases”, afirmó.
Francisca Mora, es estudiante de Ingeniería en Alimentos, tercer año del proceso de convalidación de estudios del Técnico Universitario en Gestión y Desarrollo de Productos Alimentarios.
“A nuestro grupo nos correspondió asesorar a la emprendedora Leonor Bequer, que elabora pastas de ají, en la Planta Piloto y nosotras la estuvimos ayudando a elaborar los manuales de procedimiento que ella requiere y su planta de procesos que proyecta concretar”, precisó.
La Ingeniera en Alimento en formación, explicó que lo anterior “es muy relevante para una emprendedora, ya que puede obtener la resolución sanitaria, puede tener su local en norma. Si ella no cumpliera con esto, no tendría ningún respaldo de una resolución”, argumentó.
Finalmente, la estudiante, se refirió a su formación profesional y cómo estos procedimientos y trabajos prácticos “que nos vinculan con el medio y con aplicaciones de lo aprendido a la vida real, nos sirven mucho, ya que así como aprenden los emprendedores, nosotros también lo hacemos”, destacó.
Mariela Huaquín, también cursa la carrera de Ingeniería en Alimentos y, al igual que sus compañeros, realiza la continuidad de estudios de la carrera de Técnico Universitario en Gestión y Desarrollo de productos Alimentarios.
“Nosotros primero hicimos un diagnóstico a la emprendedora, en terreno, para ver qué falencias tenía, desde la elaboración de los productos hasta la etapa de consolidación de la creación de su planta. Un trayecto largo. Además de los productos que realiza habitualmente, quería innovar y concretó dos productos nuevos y, junto con ello, quería regularizar su planta. Ella, elabora en la Planta Piloto de la ULagos, pero también desea iniciar su empresa. Está en la creación de los manuales y todo lo que implica esto ante la autoridad sanitaria. Los manuales de producción de todas las áreas y lo que significa procesar un alimento de calidad y que sea inocuo para el cliente”, detalló.
Publicado por: Marcelo Morales Mena